mensaje de acogida



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pensamiento con alas.





jueves, 23 de junio de 2016


Retorno al laberinto

 
Cuando visites mi ciudad

hasta el tope de revolución en las redes

del mundo,

podrás encontrar de todo,

menos revolucionarios.

Aunque se diga que vive la revolución

se sabe que está muerta.

En los escombros de mi ciudad

se ha perdido el alma

―nada extraño,

tiene que perderse el alma

si te niegan la vida.

Lógico,

después de cada revolución

el mal deja de ser visible

pero no se extermina,

esa es la gran mentira.

La gran mentira es que se puede acabar con él,

pero es más fácil acabar con ellos.

Después de una victoria

el ganador más fuerte

cree que hasta puede desaparecer a Dios

y lo cree,

hasta sentir que ha perdido el alma.

Nuestro tiempo es ingrato,

gobierna la percepción más que la verdad

el control más que la piedad.

La revolución vaga en túneles imaginarios,

en espacios aventureros,

invocando espectros amenazantes

descontrolados y airados.

Al final de eso se trata:

llamar a los muertos para que vuelvan a morir

y almas a sus laberintos.

 

 

Enero 2016